Nos referimos a la peregrinación jacobea desde Portugal, que presumiblemente ya existía en la época alto medieval.Puentes, capillas rurales, santuarios, cruceiros, pazos y ciudades históricas se van desgranando a lo largo de una ruta que nace en las orillas del río Miño, en la ciudad de Tui, para concluir ante el sepulcro jacobeo. El Camino Portugués en Galicia constituye una ruta de notables evidencias monumentales, con fuertes realidades culturales que van más allá de lo arquitectónico y de lo museístico, para significar un espacio de privilegio paseando a caballo entre amigos. Si el peregrino lo desea, también está disponible el Camino Portugués desde la ciudad de Braga.
Tui se presenta como punto de arranque del Camino Portugués en Galicia. Pasando a Ponte das Febres se presentan dos opciones: continuar el camino que surge frente al puente, de dificil tránsito en invierno, o tomar el de la izquierda, dando un pequeño rodeo. Ambas posibilidades llevan hasta el lugar de A Madalena.
Siguiendo la Vía romana el trazado se incorpora a la N-550, internándose en Redondela a la altura del convento de Vilavella. En Redondela la ruta discurre por el medio de la villa en la cual se encuentra un albergue histórico del siglo XVI denominado ‘Casa da Torre’ que es uno de los principales del Camino Portugués.
A la salida de Redondela, pasado el puente del ferrocarril, el Camino se introduce en un bosque hacia el pueblo de Soutoxusto. Rodeado de pinos, se desciende por el lugar de Sete fontes para atravesar Arcade, lugar conocido por sus sabrosos mariscos de la ría que podremos degustar.
Después de la mariscada, llegamos al histórico Pontesampaio: el Camino cruza el río Verdugo por el puente, donde, en la Guerra de la Independencia, se produjo una de las mayores derrotas del ejército napoleónico en Galicia, a manos del pueblo armado.
El Camino se acerca a Pontevedra, dejando atrás lugares como Bértola. Después de entrar en la ciudad el Camino conduce de la Peregrina a la inmediatamente a la plaza de Ferreira.
El Camino abandona Pontevedra por la rúa da Santiña. Dejando a la derecha del trazado un reposado castañal, la ruta discurre paralela a la vía del ferrocarril hasta el lugar de Pontecabras, prosiguiendo rumbo hasta alcanzar, entre pinos y eucaliptos, la iglesia y rectoral de Santa María de Alba.
De aquí el camino continúa por los lugares de Casal de Eirixio y O Pino y penetra en bosques profundos que discurren, entre rumor de aguas, próximos a antiguos molinos. A la altura del molino de Solleiros, el Camino gira suavemente hasta llegar a Valga continuando hacia Padrón ya en la provincia de A Coruña.
manos del pueblo armado. El peregrino puede hacer una pausa y descansar en el Santiaguiño do Monte, lugar que posee un bello mirador, una capilla dedicada a Santiago y un altar con la imagen de Santiago en unas rocas.
Una vez en Santiago el itinerario entra en la plaza de «O Obradoiro», donde se encuentra la fachada principal de la basílica jacobea, cuya entrada conduce al peregrino al Pórtico de la Gloria. Otra posibilidad de acceso al interior basílica -preferida por los peregrinos- es seguir la calle Fonseca, bordeando el ala meridional del claustro, hasta la plaza de As Praterías, donde se sitúa la fachada sur de la catedral.
Después de visitar la catedral y su entorno, les trasladaremos hasta el aeropuerto o estación correspondientes donde acabarán nuestros servicios.